El presidente de la Audiencia Provincial de Córdoba, Francisco de Paula Sánchez Zamorano, mostraba hace unos días su «preocupación» por la incidencia de la violencia machista y familiar entre niños y adolescentes, indicando que el 12% de los asuntos que llegan a los juzgados de menores de Córdoba corresponden a esta negativa tendencia. En esta misma línea, el Instituto Nacional de Estadística publicó este martes que durante el pasado año hubo casi un 30% más de casos de violencia machista sobre menores de 18 años en España.
Diario CÓRDOBA ha dialogado con especialistas de la Educación, Psicología y Derecho para que analicen por qué creen se puede estar produciendo este repunte de denuncias de violencia de género en menores de edad.
Antonio Erencia, responsable de la Asociación de Directores de Institutos de Andalucía en Córdoba (Adián) , señala que en base a los citados datos hay que seguir trabajando, «en nuestro caso desde el ámbito educativo», para lograr la igualdad, pues aunque es un tema transversal que se aborda en los temarios, en talleres de igualdad, día contra la violencia de género, día de la mujer, entre otras actividades, habrá que continuar insistiendo en la formación, en colaboración con otras instituciones públicas y privadas, como el Instituto Andaluz de la Mujer, el Instituto Andaluz de la juventud, Diputación, Guardia Civil, Policía, asociaciones de mujeres, entre otros colecctivos.
Según Erencia, el incremento en los casos de violencia de género en menores de 18 años tiene difícil explicación, «ya que en los centros educativos llevamos años trabajando la igualdad y existe un coordinador de igualdad, por lo que confiamos en en que la labor que estamos realizando los profesionales de la educación siga dando resultados porque somos sus referentes, aunque es un esfuerzo que tiene que perdurar en el tiempo, ya que los chicos reciben mensajes desde otros muchos foros que no son el colegio o el instituto».
En esta misma línea, Beatriz Guerrero, directora del colegio Carlos III de La Carlota, señala que en su centro se trabaja la igualdad y la convivencia desde la etapa infantil con un enfoque positivo y destaca que gracias a esa formación las niñas tienen cada vez más claro que son libres para decidir y que pueden asumir roles que antes se asociaban solo a los niños e igualmente también los chicos aprenden que pueden optar por aficiones u otras parcelas que se han vinculado tradicionalmente al sexo femenino.
Guerrero apunta que se ha avanzado mucho en conocimiento de la igualdad. Por eso, asegura que resulta «preocupante» que, cuando ya crecen e inician relaciones de pareja, es cuando algunos chicos o chicas parecen adoptar actitudes de violencia, lo cual puede estar influenciado por contenidos procedentes de redes sociales, videojuegos o del abuso y control a través de los móviles.
Sobre este mismo asunto, la profesora titular del departamento de Psicología de la Universidad de Córdoba Carmen Viejo, que está llevando a cabo el estudio Competencia para las relaciones sentimentales en el proceso de cortejo adolescente, en colaboración con varios institutos, expone que la respuesta para afrontar este posible aumento de casos de violencia de género en menores tiene que venir de la mano de la educación. «La mayoría de estos comportamientos violentos tiene una intensidad más baja, de modo que si estos menores reciben ayuda para un enfoque correcto de su actitud, su agresividad puede desaparecer o reducirse, estima esta profesora.
Carmen Viejo destaca que los chicos de hoy saben identificar mucho mejor que sus antecesores cuándo existe violencia de género, aunque sigue siendo un tema tabú para muchas familias, lo que conduce a que haya adolescentes que acaben buscando la información en series, películas o redes sociales que replican la violencia de género, estereotipos sexistas e incluso la pornografía a edades en la que estos chicos no están maduros para gestionar este contenido.
La coordinadora del Plan de Igualdad del IES Góngora, Toñi Monterroso, aunque recalca que es mayoría el alumnado que tiene claro lo que es la igualdad y sabe detectar y poner freno a comportamientos de violencia de género, existe un grupo menor, pero creciente, de chicas y chicos que, influenciados por las redes sociales, reality shows o influencers están adoptando comportamientos machistas que no se veían hace años e incluso no ven necesario que haya que seguir trabajando por la igualdad o contra la violencia de género, cuando queda mucho por lograr. «No son conscientes de lo que es el machismo o el respeto. Frente a ello, en los institutos llevamos años trabajando en todos los contextos, desde el prisma de la igualdad y la diversidad», añade Toñi Monterroso.
Por otro lado, la letrada Berta Aparicio, diputada responsable de la Comisión de Menores del Colegio de Abogados, indica que el aumento de denuncias de violencia de género en menores puede deberse a que las chicas reconocen mejor ahora cuando pueden estar sufriendo esta situación. Subraya que este problema no está acotado a un segmento social concreto y que afecta tanto chicos como a chicas, aunque en mayor medida quien ejerce la violencia es el sexo masculino sobre el femenino. Esta abogada cree que el auge de casos está muy unido al consumo de pornografía en jóvenes y adolescentes y al abuso de las nuevas tecnologías, donde predomina un concepto erróneo de que el control es amor, de forma que los chicos quieren controlar las amistades, contraseñas o incluso la forma de vestir de sus parejas.