Redacción 1 | 6 de agosto de 2016

Este viernes 5 de agosto, centenares de carloteños partieron por su propia iniciativa o bien en los grupos organizados por las diferentes asociaciones de nuestra localidad.

La salida partía desde el consistorio municipal o bien desde otros puntos, que pasaban por la pedanía de la paz. El recorrido costaba de 20 km, aunque muchos eligieron salir de La Guijarrosa para hacer la mitad del camino, por la exigencia que tenía el largo recorrido.

De igual forma otros muchos peregrinos hacían su camino en bicicleta o corriendo.

Otras localidades procedentes de pueblos como Puente Genil, Santaella, Córdoba, Fernán Núñez, Montemayor, Montilla, La Rambla, hacían su propio recorrido peregrinando a lo largo de la oscura noche sin nada de luna, hacia la ermita de “Nuestro Padre Jesús del Calvario” de Montalbán.

Y con la única luz de una linterna, agua y algo de comer, los peregrinos recorrieron  de polvo, piedras y asfalto.

Dentro de la multitud de personas que hacían el camino, también hubo casos de lipotimia, como fue el que se encontró un monitor deportivo del patronato municipal de de La Carlota, que realizo su labor de primeros auxilios de forma desinteresada para recuperación de la persona.

Muchos peregrinos se sumaron  a esta iniciativa, como una jornada meramente deportiva y de ocio, realizándola en convivencia con los peregrinos que si mantienen su fe, conocidos como “Hermanos del Campo”, que, con la esperanza de ver sus promesas cumplidas o sus ruegos escuchados, recorren la distancia desde su casa a Montalbán no tienen miedo al calor, ni al dolor de pies, ni al polvo del camino, ni a la oscuridad de la noche.  Su único objetivo es poder llegar a la Ermita montalbeña y poder besar a al Padre Jesús del Calvario y estar, un año más, frente a Él, tocar su talla y besarla.